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San Rafael Entrevista Martes, 22 de Enero de 2019

Carolina Moralejo despide su reinado: ‘Hoy soy una mejor persona’

La reina de la Vendimia de San Rafael asegura que vivió un año de crecimiento personal, y recuerda los mejores momentos y también los sinsabores de su experiencia.

Martes, 22 de Enero de 2019
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Fotos: Jorge Gutierrez / Mediamendoza.com

22/01/2019. Carolina Moralejo fue elegida reina de la Vendimia de San Rafael el 10 de febrero del año pasado. El nombre del distrito que representó, Rama Caída, resonó 34 veces en el anfiteatro Chacho Santa Cruz. Y la joven, entonces de 23 años, se convirtió en la representante anual del departamento.

350 días después, el próximo 26 de enero, la reina entregará sus atributos y volverá al llano. A poco de cumplir su plazo, Carolina comienza su despedida, recuerda su experiencia con una sonrisa y la describe como una etapa de significativo crecimiento personal.

La reina rememora, en una entrevista exclusiva con Mediamendoza, los mejores momentos de su reinado, aconseja a sus pares y a su futura sucesora, agradece, recuenta y confiesa sus momentos más bajos.

¿Cómo viviste la experiencia de ser reina de los sanrafaelinos?

Mi experiencia como reina de los sanrafaelinos fue muy positiva y enriquecedora. Pude visitar cada distrito, y llegar a lugares donde hay mucha necesidad. Y a partir de eso generar eventos y actividades solidarias, ya sea para ayudar o para estar, hablar y compartir momentos. Visité hogares, merenderos, muchas escuelas. Pude estar. Y estoy muy agradecida de que los sanrafaelinos me hayan tenido en cuenta y recibido con tanto cariño. Esta experiencia me hizo crecer a nivel personal. Uno aprende a manejar ciertas situaciones, a ver lo positivo. Traté de enfocarme en la gente, en las cosas buenas, para poder ayudar. Y eso me hizo crecer muchísimo. Hoy soy una mejor persona. Estoy más atenta a ayudar a la sociedad. Despertó en mí la solidaridad.

¿Tuviste que dejar de hacer algo por Vendimia?

Yo trabajaba en varios gimnasios y tenía horarios ocupados todo el día. Tuve que dejar, porque no tenía tiempo. Y quería disfrutar. Siempre quise participar de Vendimia. Y no quería ir como loca con el trabajo. Solo me quedé con algunas horas, para seguir haciendo lo que me gusta y no perder el contacto. Y respecto a mi vida social, también tuve que dejar de estar presente algunas veces. 

He tenido un año muy movido con muchas actividades. Pero no me arrepiento de nada. Vendimia se vive sólo una vez. Y como reina de San Rafael yo sentía el compromiso de estar con la gente. Eso me ha hecho muy feliz. 

¿Qué actividades realizaste a lo largo del año?

A lo largo del año hice vistas a escuelas. Trabajé mucho con merenderos. Llevé actividades, juegos. Hice eventos de recaudación. Organicé una maratón fitness. Hice visitas a asilos, una de las actividades que más me ha gustado: escuchar las historias de nuestros abuelos. Participé en la FIT en Buenos Aires. Participé de festejos del Día del Niño en casi todos los distritos. Hice ferias de ropa para ayudar a juntar recursos; repartimos ropa que sobró. Visité familias necesitadas y llevé mercadería y juguetes. Y también surgieron actividades no planeadas, como forestar en distritos.

¿Presentaste algún proyecto significativo para Vendimia o relacionado a alguna otra área?

El año pasado, apenas salí reina de Rama Caída, presenté un proyecto para que los agricultores tuvieran acceso a la fiesta y ocuparan un lugar en primera fila. Porque la fiesta es un homenaje a ellos. Más tarde, durante el año, presenté otro proyecto para que se realice una fiesta del vino artesanal. Hay también en marcha otro proyecto destinado al reciclaje.

¿Qué proyectos tenés para después del 26 de enero?

Voy a usar las puertas que se han abierto. Como profe de educación física, tengo el proyecto de dar clases de entrenamiento funcional gratuitas en los CICs (Centros Integradores Comunitarios) para las personas que no pueden pagar un gimnasio. Que puedan trabajar físicamente en una actividad dinámica. Que estén en grupos, para adultos y para adolescentes, que no estén tanto en la calle y hagan una actividad en la que se sientan a gusto. Otro de mis proyectos es que se instalen gimnasios al aire libre.

También tenemos una idea, con la coordinadora de reinas, Celina Tapia, de armar un centro de equinoterapia, para promover la recuperación de niños, adolescentes y adultos, a través de los caballos como herramienta terapéutica.

¿Cómo fue la experiencia Vendimia en Mendoza?

Fue hermosa. La disfruté muchísimo. El grupo de reinas fue maravilloso. Volví feliz. Hace poco pasamos unos días en el Valle con las reinas departamentales. Ahora estamos planificando unas vacaciones todas juntas. Fue un grupo hermoso y logramos una amistad muy linda. No fuimos enfocadas en ganar, fuimos a disfrutar y lo conseguimos. Yo ahora digo que tengo una amiga en cada departamento.

Vendimia también unió a mi familia. Muchos dejaron cosas de lado para acompañarme y hacerme el aguante. Para mí fue muy lindo disfrutarlo y compartirlo con ellos. Sentir su presencia. Fue un apoyo incondicional. Me permitió disfrutar y vivir Vendimia.

¿Cuál es el recuerdo de Vendimia que más llevarás en tu corazón?

El recuerdo más significativo e importante es haber estado en el Frank Romero Day representando a San Rafael y viendo a mi familia y amigos alentándome en esa noche tan especial. Siempre lo soñé y lo imaginé. Pero era un sueño inalcanzable. Pensé que era muy difícil de conseguir. Que necesitaba mucha suerte para llegar ahí. Pero por algo dios me puso ahí.

¿Qué es lo que menos te gustó de Vendimia o algo que te dejó un sinsabor?

Los comentarios de la gente negativa, de personas que querían hacer daño. Soy una persona que quiere agradarle a todo el mundo, ser servicial. Pero esta experiencia me enseñó que hay mucha gente que va a quererte por cómo sos como persona y otros que no te van a querer por eso mismo, por lo que sos. Al principio me dolió leer o escuchar comentarios de cosas que se decían, mentiras. Pero hay que aprender de eso. Entendí que hay gente que directamente no te quiere, y no necesariamente porque hagas algo mal. Me llevó a decir: “Bueno, el problema no es con migo, el problema lo tienen ellos, son personas negativas; en lugar de hacer el bien, buscan el mal”.

En Mendoza supe que las otras reinas sufrían lo mismo. Me quedé tranquila, y dije: “Esto se presta para que la gente hable mal”. Pero una tiene que estar tranquila. Gracias a las personas que estaban alrededor, pude ver que tenía que enfocarme en la parte positiva. Así me olvidé de lo negativo.

¿Qué consejo le darías a las candidatas y a quien te suceda en el cetro?

Mi consejo es que se enfoquen en cosas positivas, que miren cómo pueden ayudar, cómo estar con la gente, cómo acompañar. Que no se enfoquen en la competencia, porque la van a pasar mal. Que traten de brillar como personas, porque una reina brilla cuando tiene luz propia, no cuando opaca a las demás. Que se enfoquen en las cosas buenas, que son las que dejan los mejores recuerdos.

Cuando uno va a algún lugar donde hay una necesidad, las personas -a veces personas muy humildes- lo sienten y lo agradecen muchísimo. Y el amor que te brindan te llena el alma. Son momentos que nunca olvidás. Sientan el compromiso de Vendimia, porque la gente espera reinas presentes.

¿Cuál es tu mensaje de despedida para los sanrafaelinos?

Es un mensaje de agradecimiento. Agradecimiento por tanto amor y cariño que he recibido durante todo el año. He sentido el acompañamiento y el afecto en cada lugar en que he estado presente. Estoy muy agradecida a los sanrafaelinos, y también a las personas que me han ayudado, que sumaron. Sin su apoyo, no hubiera podido hacer las cosas que hice: el apoyo de mi familia, de la coordinadora, de la Municipalidad. Cada uno aportó su granito de arena.

Fue un orgullo haber representado a San Rafael. Les doy las gracias a los sanrafaelinos. Ha sido un placer.