Epistaxis

09/08/2018

Comúnmente conocida como hemorragia nasal, se caracterizan por derrame de sangre proveniente de los vasos sanguíneos, ubicados en la parte anterior del tabique nasal o a nivel posterior del tabique nasal. De esta ubicación las podemos clasificar en anterior siendo las más frecuentes o posterior siendo las menos frecuentes.

Causas: traumatismos nasales… accidentes... exposición a sustancias químicas irritantes.
Sequedad de la mucosa nasal, frecuente en época de invierno por la calefacción.

Rinitis severas.

Crisis de hipertensión arterial, habitualmente pacientes que también están anti coagulados.

Patologías relacionadas a enfermedades sanguíneas como leucemias, hemofilia, tumores, alteraciones hormonales.

Conducta a seguir ante un episodio antes descripto: realizar la compresión de la fosa nasal por un tiempo no menor a 3 minutos. Colocar hielo local puede mejorar y ayudar a cohibir la hemorragia. No inclinar la cabeza hacia atrás del paciente para evitar ahogos, calmar la ansiedad, concurrir rápidamente a la consulta con un especialista de ser posible, sino concurrir  a la guardia médica más cercana.

En guardia se realiza taponaje endonasal anterior o de ser necesario taponaje anteroposterior, se administran medicación que mejoren la coagulación, antibióticos y analgésicos ya que el taponaje endonasal es muy molesto si no está bien realizado. Se solicitan también análisis de sangre para evaluar al paciente y en caso de pacientes con traumatismo se solicitan estudios de imágenes generalmente tomografías computadas.

Con pacientes hipertensos es necesario corroborar que los valores de dicha tensión estén dentro de valores normales. En pacientes con medicación anticoagulantes es necesario consultar con el médico tratante. En los pacientes con traumatismos nasales, habitualmente necesitan diagnóstico de fractura nasal y de ser necesario, reducción de fractura nasal.