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Futbol Copa Sudamericana Miercoles, 5 de Mayo de 2021

Independiente lo ganaba, pero se lo empataron en Brasil

Después de los problemas que sufrió desde su llegada, Independiente empató 2-2 con Bahía en un partido que ganaba por dos goles y casi lo pierde.

Miercoles, 5 de Mayo de 2021
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5/5/2021

No fue precisamente un viaje de placer para Independiente, pero finalmente la odisea que vivió en Salvador terminó con un final más que aceptable. Pese a perder a ocho jugadores, que no pudieron ingresar a Brasil por estar, supuestamente, contagiados de covid-19, al igual que el entrenador asistente Pedro Monzón, el equipo de Avellaneda se trajo un punto de oro al igualar 2-2 con Bahía y sigue en lo más alto el Grupo B de la Copa Sudamericana.

Jonathan Herrera, en el cierre del primer tiempo, y Alan Velasco, en el inicio de la parte complementaria, ambos de tiro penal, le dieron a su equipo una ventaja que parecía decisiva para los futbolistas que pudieron ingresar al terreno de juego, regado por una copiosa lluvia.


Pero Thaciano, primero, y Luiz Otavio, después, nivelaron el marcador. Y al final hasta lo pudo ganar el equipo brasileño, que dispuso de un penal a seis del cierre del tiempo reglamentario, pero Sebastián Sosa, una vez más, se vistió de héroe y neutralizó el disparo de Gilberto.

De esta manera, Independiente continúa como único líder del Grupo B, con 7 puntos, seguido por Bahía, con 5, Montevideo City Torque, con 1, y Guabirá, sin unidades. Estos dos últimos equipos chocarán este miércoles en Montevideo. El Rojo, en tanto, volverá a presentarse el martes venidero visitando a los uruguayos desde las 21.30 en el inicio de la cuarta fecha.

Bajo una lluvia bastante fuerte, que por momentos anegó la cancha, Independiente realizó un planteo inteligente: trató de aquietar el ritmo cuando dispuso del balón y de defender con mucha gente en su campo cuando la pelota pasó por los pies de los jugadores rivales. Era cuestión de cerrar espacios y que los minutos pasaran. Al fin, un punto le caía más que bien.

Y no lo hizo nada mal el Rojo durante la primera media hora, en la que Bahía tuvo la iniciativa pero apenas llegó con un cabezazo del ex Colón Germán Conti, cuyo envío, tras un córner desde la izquierda, fue rechazado magníficamente por Sebastián Sosa.

Al equipo de Avellaneda le costó llegar. Recién tuvo una clara sobre los 27 con un remate de Lucas Romero, el patrón del mediocampo, que se fue apenas alto.

No pasaba sobresaltos la visita pero un par4 de descuidos en su última línea pudieron poner en peligro el plan. Dos veces quedó Gilberto mano a mano con Sosa y en las dos ganó el arquero, manteniendo el cero en su valla.

Parecía que el parcial se cerraba en blanco, pero en una acción aislada le dieron un metro a Alan Velasco y la promesa de la entidad de Avellaneda hizo magia en el área, desairando a Conti, primero, para inmediatamente ser derribado por Luiz Otavio. Del penal se encargo Herrera, quien con un tiro esquinado marcó su quinto gol en el certamen y le dio la ventaja parcial a su equipo a los 42.

El inicio de la parte complementaria coincidió con un diluvio que complicó la circulación del balón y dio lugar a errores, como el que a los 5 minutos cometió Renán Guedes al llevarse puesto a Braian Martínez dentro del área. Esta vez fue Velasco el encargado de ejecutar la pena máxima, con el mismo resultado. El partido parecía liquidado,

Pero cinco minutos más tarde Thaciano, tomando un rebote dentro del área, definió cuando Sosa ya había quedado sin chances tras rechazar un disparo de Rodriguinho, que luego pegó en el poste y volvió al centro del área a los pies del goleador.

Se vino Bahía, entonces, motivado por el descuento. Independiente resistió hasta que a ocho del final, tras un córner desde la derecha, Luiz Otavio, de cabeza, niveló las cosas. Y un par de minutos más tarde pareció que la debacle iba a ser total, pero Sosa, quien terminó siendo la figura del partido, tapó un penal que Gilberto pateó muy mal.

Terminó igualando Independiente y por cómo se dieron las cosas desde la salida de Buenos Aires, toda la familia roja debería estar más que contenta. Todavía no tiene la clasificación en el bolsillo, pero un buen resultado en Montevideo en una semana lo dejará en las puertas de los octavos de final, considerando que los dos últimos partidos del grupo serán en Avellaneda.