La sede de la Asociación Italiana de Socorros Mutuos fue el escenario del emotivo acto conmemorativo por el Día de la República Italiana y el Día del Inmigrante Italiano, una celebración que reunió autoridades locales, representantes consulares e integrantes de distintas instituciones del departamento.
La ceremonia contó con la presencia del Intendente Alejandro Molero y del representante consular de Italia, José Saponara, quienes acompañaron al presidente de la Asociación Italiana, José María Grosso, en un acto cargado de historia, memoria y sentido de pertenencia.
En sus palabras, Grosso destacó la importancia de reconocer el legado de los inmigrantes italianos, recordando que el 3 de junio fue elegido como Día del Inmigrante Italiano en conmemoración del nacimiento del General Manuel Belgrano, hijo de un inmigrante genovés. "Llegaron a estas tierras con la fe puesta en Dios y venciendo el desarraigo, pronto progresaron en todas las actividades que desarrollaron, enriqueciendo el patrimonio espiritual y material de nuestra patria", expresó. También remarcó el valor de la transmisión cultural: "aquí transmitieron a sus hijos sus costumbres para mantener viva la tradición y el afecto a aquella lejana Italia".
Por su parte, el representante consular José Saponara ofreció un discurso profundo y conmovedor, subrayando que el 2 de junio de 1946 no fue solo una fecha política, sino un acto de valentía colectiva que marcó el nacimiento de la República Italiana. "Hoy celebramos algo más profundo que una fecha en el calendario. Celebramos una elección, una afirmación de identidad. El Día de la República y el Día del Inmigrante pueden parecer historias paralelas, pero en realidad son capítulos del mismo libro: el libro de una humanidad que camina junta buscando dignidad, justicia y pertenencia".
Saponara también recordó a quienes cruzaron el océano con sueños y recuerdos a cuestas, dejando una huella imborrable en la cultura argentina: "Vinieron del otro lado del mar con una maleta llena de esperanzas, recetas de familia, cartas guardadas y fotos en sepia. sembraron en cada rincón un poco de Italia".
El intendente Alejandro Molero cerró el acto con un emotivo testimonio personal, evocando la historia de sus propios abuelos inmigrantes, que escaparon de la devastación de la Segunda Guerra Mundial para forjar una nueva vida en suelo argentino. "Vinieron a transformar esta tierra desde la humildad, desde el sacrificio y con la esperanza como motor. Nunca dejaron de llorar por su Italia, pero abrazaron a la Argentina como su segunda patria", dijo conmovido.
Molero también resaltó el papel clave de la comunidad italiana en el desarrollo del departamento: "Italia hizo que General Alvear fuera una tierra pujante y de oportunidades. Sigamos trabajando para que continúe siéndolo para las futuras generaciones".
El acto fue, sin duda, un homenaje sentido no solo a Italia como nación, sino al espíritu de todos aquellos que, dejando atrás su tierra natal, eligieron Argentina como su hogar, sembrando en estas tierras valores, cultura y trabajo. Un encuentro que reafirmó la vigencia de la memoria colectiva y el compromiso con las raíces que construyen identidad.