Próvolo: encontraron pornografía infantil en las computadoras de los curas acusados de abuso

La nueva prueba se suma en la causa contra los sacerdotes acusados de abusar sexualmente de chicos sordos e hipoacúsicos en el Instituto Antonio Próvol, alias "La Casita de Dios". A la espera de la audiencia judicial de este viernes donde se determinará si los acusados continuarán con prisión preventiva, la Fiscalía Luján-Maipú logró detectar que los curas tenían en sus computadoras material de pornografía infantil, además de disquetes, DVD´s, CD´s y rollos fotográficos.

La pericia complica aún más a los implicados en un nuevo escándalo protagonizado por miembros de la Iglesia Católica, entre los principales acusados, los sacerdotes Nicola Corradi, de 82 años, y Horacio Corbacho, de 50 años, así como uno de los empleados de la institución, José Luis Ojeda, también sordomudo. Todos habrían consumido ese material ilegal y se investiga si en las imágenes aparecen niñas y niños de la entidad, la cual ya cerró sus puertas y dejará de dictar clases, por decisión del Gobierno escolar provincial. Mientras, hay una puja entre docentes, directivos y padres por el futuro de toda esa comunidad educativa.

Según reveló el diario El Sol, Ojeda tenía un rollo fotográfico y tres negativos de alto contenido sexual donde se vería a menores. Asimismo, en la habitación de Corradi se dio con tres negativos fotográficos.

De esta manera, las víctimas, a través de sus abogados, reclaman a la magistrada de Garantías, Alejandra Alonso que los detenidos permanezcan tras las rejas, mientras que Corradi goza del beneficio de prisión domiciliaria, por su avanzada edad y problemas de salud. Este viernes será clave, ya que se decidirá si los imputados, que son cinco en total, mantendrán la prisión preventiva.

Los primeros días de diciembre, las autoridades judiciales allanaron la habitación de Corradi, donde también se encontraron revistas y material audiovisual comprometedor. El sacerdote ya había tenido denuncias por abuso sexual en Verona, Italia, en la década del 90, por lo que fue trasladado a nuestro país. El caso de Mendoza mantiene en vilo no sólo a la curia local, sino al Vaticano, que fue advertido de la situación del sacerdote. De avanzar el proceso contra los acusados y ser declarados culpables, podrían recibir unos 50 años de cárcel, por la cantidad de hechos en los que se los involucra.

Además de Corradi, Corbacho y Ojeda, están detenidos e imputados el monaguillo Jorge Bordón, de 55 años así como el jardinero Armando Gómez, de 46 años.