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El país árabe da un gran paso en su transformación urbana con la inauguración del tren automatizado más largo del mundo en Riad.
Arabia Saudita continúa demostrando su ambición por transformar su infraestructura urbana, impulsada por proyectos megaestructurales que parecen sacados de una película de ciencia ficción. A finales de noviembre, el país inauguró el sistema de tren sin conductor más largo del mundo.
Este tren no solo marcará un cambio en la movilidad dentro de la capital, Riad, sino que también forma parte de la visión más amplia de modernización que busca el reino para los próximos años.
El 1 de diciembre, RATPDev, encargada de la operación, anunció el inicio de la actividad del nuevo metro de Riad. Con una extensión de 176 kilómetros, el metro contará con seis líneas automatizadas, 85 estaciones, y una serie de infraestructuras complementarias, que incluyen 80 líneas de autobuses y tres rutas de tránsito rápido. La implementación de este sistema está pensada para reducir la congestión vehicular en la ciudad, mejorar los tiempos de traslado y contribuir al cuidado del medio ambiente al disminuir las emisiones contaminantes.
El tren también contará con cuatro estaciones que se destacan por su diseño arquitectónico, obra de renombrados arquitectos internacionales. Estos detalles estéticos reflejan el enfoque de Arabia Saudita por no solo construir una red de transporte eficiente, sino también convertirla en un atractivo urbano y cultural.
Con una capacidad máxima de 3,6 millones de pasajeros diarios, la red de trenes se perfila como un punto clave para el transporte en Riad. Según los responsables del proyecto, la iniciativa aliviará la congestión en las calles y proporcionará a los residentes un acceso más fácil a lugares clave como hospitales, universidades, centros comerciales y edificios gubernamentales. Esta mejora en la infraestructura de transporte tiene como objetivo transformar la vida diaria de los ciudadanos, al ofrecer una opción de viaje más rápida, económica y, sobre todo, sostenible.
Además de facilitar el acceso a diversas zonas de la ciudad, la red automatizada de metro es vista como un paso importante hacia la Visión 2030 de Arabia Saudita, un plan estratégico que busca diversificar la economía del país y reducir su dependencia del petróleo. De acuerdo con el presidente regional de Alstom para África, Oriente Medio y Asia Central, Andrew DeLeone, la implementación de tecnologías innovadoras en la infraestructura de transporte no solo reestructura la movilidad urbana, sino que también promueve el crecimiento económico y contribuye a la sostenibilidad.
El sistema de tren se suma a otros grandes proyectos de infraestructura que están siendo desarrollados en Arabia Saudita, como el cubo Mukaab y la ciudad de The Line. Estos planes, que incluyen desde eventos deportivos hasta complejas estructuras urbanísticas, están alineados con la visión de transformar el país en un referente global en términos de urbanización y sostenibilidad.
El metro de Riad representa un gran avance para el reino, porque no solo resuelve un problema de movilidad urbana, sino que también ofrece un modelo a seguir para otras ciudades en la región. Con la promesa de una experiencia de viaje cómoda, moderna y asequible, Arabia Saudita continúa demostrando su capacidad para implementar proyectos de gran escala que no solo mejoran la calidad de vida de sus ciudadanos, sino que también colocan al país en el centro de la innovación tecnológica y el desarrollo económico.
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