Testigos que estaban en la playa afirmaron que, momentos antes del desprendimiento, la joven mostró signos de angustia e intentó de todas maneras posible, comunicar su miedo. Uno de ellos aseguró que gritó desesperadamente: "¡Bájenme!". Instantes después, se soltó del arnés y cayó al mar ante la mirada atónita de los presentes. Finalmente, se confirmó su muerte.

La víctima fue identificada como Tijana Radonjic, una conocida influencer, quien se encontraba en la ciudad costera de Budva, en Montenegro, a orillas del mar Adriático, cuando aceptó realizar una atractiva actividad, sin imaginar el desenlace fatal que le esperaba.

Se trata de el parasailing, una actividad que se realiza en paracaídas mientras es remolcada por una lancha.

Según información divulgada por medios locales, Tijana cayó al vacío desde una altura cercana a los 150 metros. Y todo quedó registrado en un video que circuló por redes sociales. Las imágenes la muestran suspendida en el aire, visiblemente nerviosa.

El material generó conmoción en la región, no sólo por lo impactante de la escena, sino también por los interrogantes que plantea sobre las condiciones en las que se desarrolló la actividad.

La triste despedida

Por otro lado, su familia también dejó su mensaje de despedida: "Nunca aceptaremos esto, ni que ya no estás. Permanecerás para siempre en nuestros corazones. Descansa en paz y que los ángeles te cuiden, ahora eres uno de ellos", afirmaron.

Una invitación que terminó en un trágico final

Radonjic había viajado a Budva junto con familiares. Durante su estadía, un empleado de una empresa de turismo acuático se le acercó y le ofreció participar de manera gratuita en un vuelo en paracaídas, según informó el portal Kuirr. La joven accedió, y antes de despegar pidió a su prima que la grabara con el celular.

El dueño de la empresa responsable de la excursión, Mirko Krdzic, habló con la prensa después del accidentem y aclaró que "Ella no demostró temor alguno antes del despegue. Nadie podía imaginar lo que iba a pasar". Además, sostuvo que el personal actuó con normalidad y que no se detectaron fallas técnicas previas al despegue.

Sin embargo, la fiscalía de Kotor ya comenzó una investigación para esclarecer los hechos. El principal objetivo consiste en determinar si existieron irregularidades en el protocolo de seguridad o si la empresa incumplió alguna normativa vinculada a este tipo de actividades. Las autoridades no descartan imputaciones por negligencia o responsabilidad penal.

Tras el impacto, equipos de emergencia locales acudieron rápidamente al lugar y lograron rescatar el cuerpo del agua. Radonjic fue velada y sepultada en Novi Sad, ciudad ubicada en el norte de Serbia, donde residía junto a su familia.

Una práctica bajo la lupa

El parasailing, también conocido como paravelismo, consiste en remolcar a una persona con una lancha mientras esta se encuentra sujetada a un paracaídas especial. El ascenso ocurre en función de la velocidad de la embarcación, y el participante suele mantenerse a varios metros de altura sobre el mar.

Esta práctica forma parte de las ofertas turísticas en muchas zonas costeras del mundo. Si bien su ejecución resulta segura cuando se siguen las normas estipuladas, su carácter recreativo no excluye los riesgos. La ausencia de controles adecuados, la falta de supervisión profesional o la presión sobre turistas inexpertos pueden derivar en tragedias como la que ocurrió en Budva.

Diversos especialistas en deportes acuáticos remarcan la importancia de contar con operadores certificados, equipos en buen estado y personal entrenado. La supervisión médica previa, el análisis de condiciones meteorológicas y el acompañamiento permanente del pasajero desde tierra y desde la embarcación resultan claves para evitar accidentes.