La víctima de la agresión de los perros fue un luchador de 33 años que sufrió heridas en sus brazos y una de sus piernas.
Ernesto Chaves corría tranquilamente escuchando música con sus auriculares por Ponta Porã, en Brasil, cuando una situación inesperada lo obligó a poner en acción sus dotes de deportista. Es que dos pitbulls lo agredieron y logró detenerlos recién cuando les realizó una serie de tomas de las artes marciales que practica.
El episodio ocurrió en el estado de Mato Grosso de Sul, fronterizo con Paraguay, cuando los perros se abalanzaron sobre él: uno le mordió la pierna causándole una herida profunda, mientras que el restante buscó atacarlo en el cuello.
"Al principio pensé que estaban jugando. Pero cuando vi que me iban a atacar, intenté escapar, pero ya era tarde. Tuvieron una reacción muy agresiva", relató el hombre de 33 años a O Globo.
Fueron en total unos cinco minutos los que demoró para controlar la situación, poniendo en práctica distintas tomas de Muay Thai y Jiu-Jitsu, disciplinas que practica hace más de una década, así como también sus conocimientos previos sobre defensa ante ataques de perros.
Sin embargo, más allá de contar con esos recursos, el hombre admitió que sintió temor por lo que podía sucederle.
"Soy una persona entrenada, pero pensé que iba a morir", reconoció Chaves, quien también sufrió la fractura de un dedo y otras lesiones en el brazo y la pierna.
Un video que grabó un transeúnte mostró la dramática escena en la que Chaves intentaba contener a los animales, mientras unas personas que pasaban por el lugar lo ayudaban a atar con sogas a los animales.
"Tengo muchos compromisos laborales. Trabajo con mi cuerpo y ahora no puedo trabajar por descuido, pero fue un alivio", reflexionó el sujeto agredido.
Luego del violento episodio, Chaves fue llevado al Hospital Regional de Ponta Porã para recibir asistencia por las heridas sufridas durante el ataque de los pitbulls.
De acuerdo con la información que aportó la Policía Civil, el dueño de los animales fue identificado en el lugar y trasladado a una comisaría para tomarle declaración.
Se trata del empresario Nerival Silva Menezes, quien dijo ante la Policía que los perros fueron liberados por un grupo de delincuentes adictos a las drogas que pretendían sustraer materiales de una obra de construcción que custodiaban los animales.
"Estaban rondando por ahí para robar y no pudieron entrar por culpa de los perros. Probablemente fueron allí, abrieron la puerta para que salieran los perros y entraron", manifestó en declaraciones reproducidas por el sitio web globo.com.
En principio, mientras la Policía investiga si la versión de Silva Menezes es cierta, trascendió que será acusado de negligencia en el cuidado o conducción de animales, un delito de poca gravedad según las leyes locales.
Elisangela Cristaldo, la delegada que quedó al mando de la investigación del caso, aseguró en declaraciones a medios locales que los perros fueron llevados con su dueño después del ataque.
"Se quedan con él porque no tenemos dónde alojarlos. El ayuntamiento no tiene un CCZ (Centro para el Control de Zoonosis), así que no hay dónde quedarse. Están vacunados y todos están bien", argumentó.
En paralelo, mencionó que la Policía fue el lunes al lugar donde estaban los perros a buscar testimonios y pruebas del hecho, pero no pudo obtener imágenes de cámaras de seguridad. Por el contrario, consiguió testimonios de personas que dijeron que el portón del lugar, que siempre está cerrado, el domingo estaba abierto.
El dueño, en tanto, manifestó que el sitio donde se encuentran los pitbulls fue reformado para reforzar su estructura.