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San Rafael Entrevista Miercoles, 22 de Febrero de 2017

Cruzar los Andes en 2017: El peso de la historia

El Destacamento de Caballería de Exploración de Montaña, a cargo del teniente coronel Héctor César Tornero, cruzó los Andes montados, tal como hace 200 años. Contaron su experiencia a MediaMendoza.

Miercoles, 22 de Febrero de 2017
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23-02-2017. El Destacamento de Caballería de Exploración de Montaña 15 partió el 30 de enero desde Campo Los Andes y arribó al límite internacional en el Paso del Planchón el pasado 2 de febrero.

A cargo del jefe del Destacamento, teniente coronel Héctor César Tornero, 65 hombres y una mujer, con el apoyo de otros 50 efectivos iniciaron su marcha empleando 22 mulas, 25 caballos y 11 vehículos. El acto que dio por comenzada la travesía se llevó a cabo en San Rafael, Mendoza; luego, siguieron camino en la primera jornada hasta el Refugio Valle Noble, tras 480 kilómetros y 12 horas andando.



En el segundo día, ya montados en 22 mulas y 25 caballos recorrieron otros 28 kilómetros hasta el Refugio Azufre, en cinco horas de cabalgata. En la última jornada, la columna montada fue alistada muy temprano y completó los siete kilómetros finales, arribando a las 11 de la mañana del 1 de febrero al límite internacional, tras una hora y media de marcha. 

Sobre su experiencia, el teniente Coronel Tornero habló con MediaMendoza:

“Todo empezó el día 30 desde San Rafael a las 11 de la mañana, hicimos el acto de inicio ordenado por el ejército, e iniciamos la marcha motorizada hasta la refugio Valle Noble, pasando Las Loicas hacia el limite, ahí estaba la primera base grande nuestra, abastecimiento”, contó Tornero.

Sobre el operativo, el Teniente Coronel comentó; “En total éramos 137 personas, pero no todos fueron montados, hubo abastecimientos, preparación del ganado, comida, transporte. Montados eran 60 jinetes”.

Seguidamente, se refirió a los desafíos de emprender una tarea ardua; “Tenía su complejidad; darle de comer a más de 100 personas, y preparar para el otro día, porque no se podía parar la marcha. Fue un movimiento coordinado y logístico complejo, pero lo importante fue revivir la odisea del capitán Freire, que termino en Planchón Vergara”.

“El ganado comía forraje de la provisión del ejército alfalfa y avena, y allá comíamos guiso de lenteja, raciones frías de sándwiches y, para terminar, el último día hicimos un fogón de soldados con un asado”, nos manifestó sobre el reto de alimentar un ejército de animales y personas.

“Te hablo en mi nombre y en el de todas las personas que participaron; fue un gran orgullo poder vivenciar esto, va a pasar tiempo hasta el alguien lo haga de nuevo. Fue un momento histórico para todos los que participamos, un momento grato para los soldados, fue una movida histórica y espiritual porque todos los hombre y mujeres que participaron estaban totalmente entusiasmados, se notaba en sus caras y en el trabajo diario, el esfuerzo”

Luego, Tornero ponderó: “Estábamos pisando la tierra por la que 200 años antes pasaron quienes dieron la libertad a nuestra patria, se sentía el peso de la historia”.

Sobre las mujeres que participaron de la travesía, el Teniente Coronel destacó: “fueron pocas mujeres pero determinantes. Una de ellas fue la teniente primero Díaz, veterinaria de la unidad, que tuvo un desempeño sobresaliente; no sólo termino su marcha haciendo la atención del ganado, porque el ganado se lastima; pierden herraduras, pisan piedras cortantes, etcétera, y  ella tenía que solucionarlo en el momento. Después efectuó el arreo en el límite, 40 kilómetros de recorrido, en una tarde noche. Un desempeño y un trabajo destacados”.

Le pedimos que contara la experiencia más remarcable del viaje, y Tornero relató: “El encuentro fue un acto extremadamente lindo y lleno de sentimiento, un encuentro donde el Ejército Argentino montado y el ejército de Chile a pie se juntan en el límite. Tuvo también la particularidad de contar con la presencia de la Asociación del Paso Sanmartiniano; 180 jinetes, todos con ponchos celeste y blanco; le dio un marco a la ceremonia”.

Finalmente, resumió la experiencia; “El paisaje volcánico de la zona, la inmensidad increíble, y una operación militar pero con esta carga emotiva es lo que va a quedar”.

Fotos: Jorge Gutierrez/MediaMendoza/Gentileza Lic. Luis Ballarini/Museo de Historia Natural/Hector Tornero/Ejercito Argentino