El arte de modelar duendes

17/03/2019

El próximo martes 19 de marzo, se celebra el Día Internacional del Artesano, una jornada dedicada a aquellas personas que crean objetos con sus manos en cerámica, vidrio, madera, metal, entre otros.

La fecha fue instaurada en homenaje al día de San José –carpintero y artesano-, y conmemora el oficio de crear y vender arte.

Con ese motivo, hablamos con Germán Castillo alias el “Duende”, un artesano que junto a su compañera de vida Alejandra, modelan y dan vida a hermosos duendes. Ellos pertenecen a la feria de artesanos de Plaza Francia.

Sobre su arte, el mundo de los artesanos, y el mercado sanrafaelino, Germán habló con MediaMendoza.

“El proyecto arrancó con la idea de independizarnos y como una necesidad de poder trabajar y tener un emprendimiento. En ese momento Alejandra estaba embarazada, con ella pensamos en la idea de empezar con algo que nos permitiera cuidar la panza y después al bebé cuando naciera” comenzó diciendo Germán sobre el inicio de este proyecto, hace casi una década atrás.

Y continuó “como siempre nos habían gustado los duendes, pensamos en empezar con eso. Lo primero que salió fue cualquier cosa menos un duende (risas), jamás habíamos modelado fue un empezar de cero”.

Sobre los duendes afirmó que él cree en su existencia y que “son seres especiales y elementales de la naturaleza que vibran en una armonía distinta, no se rigen por parámetros de los humanos si no de la energía que le da la tierra, el agua, el aire, viven en ese equilibrio natural”.

“Cuidan la naturaleza y no tienen nada que ver con la religión, ellos son protectores de lo natural, son seres traviesos, nobles y simples. A nuestro puesto ha ido gente que nos cuentan anécdotas fuertes o graciosas, que los vieron y nos cuentan que los conocieron y por eso los coleccionan, por ejemplo” comentó.

“Nosotros no los hemos visto pero siempre sentimos la presencia y a partir de nuestro emprendimiento, tenemos la necesidad de crear conciencia por lo natural. Ellos llegaron un día a nuestras vidas y empezamos a probar para ver de qué se trataba y con el tiempo nos fuimos perfeccionando para llegar a lo que hoy estamos haciendo. La meta era trabajar, tener independencia y crear un producto lindo, para sobrevivir en este mundo” afirmó.

Sobre el oficio de artesano destacó “algunos lo ven como un pasatiempo, otros con la idea de que se puede vivir y nosotros tenemos que aprovechar teniendo en cuenta que San Rafael va creciendo turísticamente”.

Al consultarle sobre los inicios destacó que “empezamos a modelar al principio consultando a otros artesanos, intercambiando técnicas, materiales. Empezamos con porcelana fría y ahora usamos es la masilla epoxi, que es un material más noble y se puede moldear mejor. Además de la durabilidad que tiene en el tiempo”.

Respecto a los materiales contó que los mismos los adquieren en una artística local que los trae de Buenos Aires, “muchas veces cuesta conseguirlos”.

“Para el armado, armamos la cabeza en masilla, las pintamos y luego hacemos un cuerpo de alambre que quede firme y se pueda articular, después se va llenando con telas y harapos. Por lo que uno ha ido leyendo los duendes siempre se visten de harapos y no tienen una ropa específica, esa parte de imaginar su ropa y vestirlos completa el terminado” destacó el artesano.

Sobre el stock que manejan contó que van trabajando en serie todos los días, para tener una cierta cantidad que les permita abastecer los regionales para los que trabajan tanto de San Rafael, como Mendoza, parte de la Costa argentina y Villa la Angostura. “A veces hemos hecho hasta 40 cabezas en un día, recuerdo que la primera vez que hice una cabeza en medio día.

Sobre todo en verano, vacaciones de invierno y semana santa, que es cuando más se trabaja”.
“Cada uno es único, todo hecho a mano hasta tienen nuestras huellas digitales, con mi pareja somos un equipo nos hemos mimetizado y hacemos todo parecido” agregó.

Germán asegura que se puede vivir de la artesanía, “en nuestro caso, nosotros que no somos muy consumidores y no usamos tarjetas ni nada de eso que nos genere una deuda, ya que sabemos que nuestra entrada no es fija. A veces puede ser mucho y a veces se gana poco, pero siempre somos conscientes cómo es este trabajo”.

“Pero vivimos bien, la idea es vivir tranquilo y ser consciente de lo que se consume. Elegimos esto para poder estar con nuestros hijos. Vivimos re bien pero no a costa de lo monetario si no de la posibilidad de estar juntos, vamos creciendo juntos, aprendiendo a ser padres, a ser artesanos, a ser amigos, todos de la mano de los duendes” agregó Germán.

“Siempre les pedimos a los duendes que nos acompañen, vivimos el presente y no tenemos algo pensado para un futuro, solo tener nuestra casa, nuestra huerta y seguir vibrando con eso. Mi casa está llena de duendes, tengo dos hijos Ciro y Simón, ellos nacieron y este nuestro trabajo era hacer duendes, van creciendo en ese mundo, de hecho a nuestra casa han venido artesanos de otras partes y paran ahí, asique ya están acostumbrados (risas)”.

Llegando al final de la entrevista Germán agregó que los duendes no están relacionados a la religión u otras creencias “los duendes no son malos no haría nada malo con lo que comen mis hijos”.

Sobre los precios afirmó que los mismos oscilan desde los 100 pesos en adelante, según el tamaño y el trabajo que demande.

Contacto en Facebook Germán Castillo o en la plaza Francia los días sábados, domingos y feriados y ahora en Semana Santa todos los días.