La vuelta a los pañales y toallitas femeninas de tela

12/05/2019

Es frecuente escuchar a nuestras madres y abuelas historias relacionadas al mítico uso de los pañales de tela o toallitas descartables realizadas con trozos de tela de algodón, que se utilizaron hasta alrededor de los 80 a la hora cambiar al bebé o cuidar la higiene femenina, que previo a la llegada de toallitas femeninas descartables, solía utilizarse también algodón.

Sin embargo, luego de casi tres décadas de su desaparición el uso de estos elementos está volviendo y para quedarse. Si bien son muchas las mujeres que aseguran que no abandonarán la comodidad de los pañales y toallitas desechables, otras ya comenzaron a probarlos personalmente o con  sus bebés, motivada por la posibilidad de reducir el consumo, ayudar a la economía y cuidar el medio ambiente.

San Rafael no es ajeno a esta movida, aquí también pueden conseguirse tanto pañales como toallitas elaboradas de forma artesanal, con telas de calidad y aptas para el uso que se les da a ambos.

Martínez, es una emprendedora local que se dedica a la comercialización de estos productos, además de protectores mamarios, juegos interactivos para niños, entre otros elementos. Dialogamos con ella para conocer más al respecto.

“Mi emprendimiento se denomina Esencia Viva, vengo trabajando hace dos años en este proyecto que está enfocado en la mujer y el niño, empecé con toallitas femeninas de tela, protectores diarios, protectores mamarios y de ahí se ha ido expandiendo a otros productos como pañales, y juegos para los niños” afirmó Camila.

Y agregó “el proyecto surge de la necesidad y de las ganas de contagiar a las mujeres de ser autónomas en la salud menstrual y dar información que es muy necesaria en esa parte, porque muchas veces no se toma conciencia al respecto”.

“Por ejemplo las toallitas femeninas que compramos o los tampones traen un montón de químicos como el asbesto, la dioxina, y el rayón, esto produce más sangrado, más hemorragia, producen olores en la menstruación y si uno usa las copitas o las toallitas de tela, te das cuenta que la sangre no tiene olor y que sangras menos de lo que uno cree. Es como ir tomando conciencia de lo que pasa en nuestro cuerpo, que se expanda y que podamos elegir sabiendo qué es lo que está pasando con las toallitas, y si voy a usarlas saber qué es lo que voy a usar sabiendo que hay otras alternativas y que esto contribuye con nuestro cuerpo, nuestra conciencia y el medio ambiente porque la basura que se genera con las toallitas y los pañales es bastante grande” explicó la emprendedora. 

En el caso de los pañales Camila explicó que si bien al ser de tela se los compara con los que se utilizaban hace años, son muy diferentes a esos. “En este caso es otra la tecnología que hay en las telas y hoy en día a eso podemos aprovecharlo y disfrutarlo, y que esto no sea un peso a la hora de lavarlos como pasaba antes”.

Además destacó “ahora hasta son lindos los colores, los diseños, todo. El formato del pañal es igual al descartable pero está separado, tiene una base que es el cobertor que es la parte impermeable y además tenés los insertos, los hay de un montón de calidades, hasta de bambú que hoy en día cuesta conseguirlos en Argentina, pero acá se usa mucho el algodón que al contacto con la piel del bebé no le produce irritación”.

Y continuó diciendo “hay tres insertos cada vez que se le coloca el pañal al bebé y el cobertor. La tela del cobertor se fabrica en Estados Unidos y en China, es un impermeable respirable que evita que el bebé se paspe, esto viene en reemplazo a la antes utilizada como bombacha de goma que paspaba mucho”.

Esos insertos que se colocan dentro del pañal es lo que se lava, mientras que el cobertor puede utilizarse por dos o tres cambios, excepto que se desborde. “Un pañal se puede usar todo el día y más quizás si el bebé no se pasó, porque el pañal está cubierto por dentro con una tela que se denomina siempre seco”.

Respecto a las cantidades de pañales, Camila destalló “el cambio del pañal se realiza cada 4 a 6 horas para tener un stock que te sirva y te rinda, hay que contar con unos 12 y 14 pañales, y unos 20 insertos, de esa manera les cambias los pañales y seguir usando cómodamente si no tenés que lavar y secar, lavar y secar. Ahí se vuelve tedioso”.

“Esto acá es muy nuevo, en otros lugares está más popularizado, pero acá en San Rafael no se conoce mucho. Pero por suerte esto está creciendo y hay gente que se interesa” agregó Camila.

Cabe destacar además que los productos son elaborados a mano, artesanales, “todos tienen una dedicación por lo que queremos seguir apostando a esto que no sea industrializado”.
Además afirmó que en un futuro le gustaría tener un local para la venta de sus productos, además del stand que tiene todos los sábados en la Feria La Soberana que se realiza todos los sábados en la biblioteca Mariano Moreno. “En San Rafael cuesta que se expanda que se sepa se conozca y después tengo 4 revenderoras en Mendoza y dos negocios. En San Rafael aún no lo he ofrecido en negocios pero es la idea”.

Sobre los precios se estima que con una única inversión de mil a tres mil pesos (según se esté dispuesto a lavar todos los días o cada tres o cuatro días) se cuenta con los pañales suficientes para un bebé hasta los dos años y medio. Los pañales son ajustables y regulables, se pueden usar desde que el bebé es recién nacido hasta que pesa 11 o 12 kilos.

“Los pañales cuestan entre 480, 600 o 1000 dependiendo las calidades, pero hago kits para no comprar de uno y que sea más barato. También hay kits para una menstruación a 600 pesos el kit de toallitas, protectores diarios, y las copas menstruales 850” sintetizó.