La cuarentena los inspira: ‘Con el arte he logrado abrir otras posibilidades para que todos puedan disfrutarlo‘

1/11/2020

Noelia Álvarez es una reconocida artista plástica de nuestro medio, su formación académica fue en el Instituto Profesorado de Arte, aunque asegura que eso llegó luego de pasar unos años por una carrera técnica, hasta que un día supo que ese no era lugar y fue en su búsqueda.

En 2004, inició junto a un grupo de colegas, Proyecto Unísono, con el objetivo de difundir el arte e incentivar el desarrollo regional, y la gestión y desarrollo de proyectos relacionado con el arte en la escuela. Actualmente continúa junto a la artista Montserrat Basols con ese espacio, donde dictan cursos para niños y adultos, y seminarios, además de la  exposición y venta de obras de artistas de toda la Provincia y de Buenos Aires.

A lo largo de su carrera artística ha presentado innumerables muestras individuales y colectivas tanto en nuestro departamento y fuera de él, inclusive en Buenos Aires y España. Entre ellas podemos citar muestras en el Centro de Congreso y Exposiciones, en el Multiespacio Vecchia Terra, en la Facultad de Ciencias Aplicadas a la Industria, en Anselmo Sociocultural, en el ECA Sur Enrique Sobich, entre otros.

La cuarentena la encontró con mucho trabajo tanto en el espacio de arte, como en la escuela donde dicta clases de Plástica, y con muchos proyectos, entre ellos una interesante muestra en Buenos Aires que estaba prevista para agosto pasado, dónde iba a tener la posibilidad de mostrar sus maravillosas obras en un espacio que reunirá a artistas de todo el país cuando logre concretarse.

En este segmento (La cuarentena los inspira) que  busca reflejar las actividades, interpretaciones y creaciones realizadas por los artistas sanrafaelinos en el marco de la  pandemia del Covid-19, dialogamos con ella sobre sus inicios, su presente y sus proyectos.

¿En qué momento de tu vida llegó la pasión por las artes visuales?

La secundaria la hice en la escuela Álvarez de Segura y en el "95 me egresé y me inscribí en una carrera técnica. Estudie varios años ahí, me iba bien, era una alumna bastante aplicada. Algo que me caracteriza es que soy una persona que tiene mucha perseverancia y me esfuerzo mucho para poder hacer las cosas bien. 

Pero a pesar de que me iba bien, no me terminaba de convencer del todo esa carrera y después de haber estado varios años cursándola, decidí dejarla para ir a estudiar artes visuales que era lo que a mí más me llamaba la atención y creo que fue la mejor decisión que pude tomar en mi vida en cuanto a lo profesional. Haber optado y elegido las artes visuales como algo importante para mi vida, como elección de trabajo, eso me pone muy contenta, por el hecho de haber optado por algo que me apasionaba mucho más.

¿Cuesta encontrar un estilo propio?

Durante el cursado tuve la suerte de encontrarme con profesores que eran excelentes y más allá de incentivarte para que seas un buen profesor, coherente con su manera de enseñar, me encontré con que uno además de ser profesor también podía tener muchas otras alternativas para poder trabajar. Eso fue algo muy importante porque durante el mismo cursado, junto a un grupo de compañeros ya empezamos a meternos en cuestiones que tenían que ver con el montaje de una muestra, con hacer visitas guiadas de muestras de artistas que venían a exponer en San Rafael.

Entonces de a poco nos fuimos metiendo con el tema del arte y eso nos incentivaba mucho más a seguir haciendo cosas  que nada tenían que ver con ser profesores y eso me gustó mucho más. Además los profesores nos ayudaban a que uno se fuera descubriendo y buscar un estilo propio que no es fácil de conseguir, hay artistas que le lleva bastantes años de procesos, de aprendizajes, crecimiento, de ir indagando en diferentes técnicas, hasta que uno encuentra la que más te identifica y con la temática que a uno más lo identifica.

Yo creo que me empecé a acercar un poco a mi estilo cuando me recibí en el examen final, ese examen tuvo como mayor identidad asociada a mí. Me gustan mucho las culturas pre colombinas, pre hispánicas, Los Mayas, Los Aztecas, me encantaba el hecho de que sus dibujos, personajes e íconos que aparecían, tenían tanta carga y tanto significado. Y a mí me gustaba eso, que con un dibujo simple podes lograr comunicar y tratar de retener al espectador en la obra, que cuando vean una obra mía no solo tenga una fácil lectura, sino que pueda entretenerse, buscar personajes, formas, dentro de la misma pintura.

¿Cómo te encontró la cuarentena?

Cuando decretaron la cuarentena nosotras habíamos iniciado con las actividades tanto en Unísono, como en el colegio porque soy profesora en una escuela primaria, donde les enseño Plástica a los más pequeñitos, y fue complicado adaptarse a una nueva forma de enseñar, pero hemos tenido buena recepción por parte de los papás, y en Unísono fue complicado porque habíamos iniciado con todos los talleres, tanto para niños como adultos y eso se tuvo que suspender.

Al principio era por 15 días, pero después se empezó a extender, a extender y los talleres estuvieron cerrados hasta mediados de año y en julio recién pudimos retomar las clases para adultos, en todo ese tiempo el tema era como poder obtener los recursos para mantener un espacio que tenía que estar cerrado y cubrir los gastos fijos y no cerrar definitivamente, porque hace 11 años que venimos trabajando y daba mucha pena bajar los brazos con esta situación.

Asique con Montse nos pusimos a hacer videos con técnicas específicas que le íbamos ofreciendo a nuestros alumnos, para que ellos siguieran avanzando y estuvieran en contacto con el arte que le hace tan bien a las personas que van al taller. 

Y en la parte artística con Montse teníamos prevista una feria que se iba a realizar en Buenos Aires en agosto, cuando empezó la pandemia la pasaron para noviembre y ahora decidieron pasarla para el año próximo. Esto para nosotras es muy importante porque es una puerta para poder mostrar lo que se hace desde Mendoza.

También teníamos prevista otras muestras que se suspendieron y se reprogramarán para el año que viene, de acuerdo como esté todo.

¿Cómo te inspiró la cuarentena?

La cuarentena nos ha inspirado de mayores de maneras diferentes, primero fue en ver la manera de sostener nuestro espacio de arte y ahí comenzamos con Montse a realizar videos para cubrir los gastos fijos que teníamos. Lo ofrecíamos a nuestras alumnas, pero también a otras personas que desearan acceder a esos videos, no sólo de aquí de San Rafael. 

Tuvimos que aprender muchísimo en muy poco tiempo, porque no estábamos habituadas al manejo de videos, de edición, porque estas situaciones más extremas hacen que uno se ponga más creativo, más práctico en un montón de cosas.

Y por otra parte, yo hace mucho que vengo con la idea de que cada objeto que uno tenga, tenga arte porque no todo el mundo puede acceder a una obra de arte, por eso decidí llevarla a objetos que uno usa y he sacado mates intervenidos. Los mates tienen un diseño que es único, están pintados a mano y me identifican a mi, porque se reconoce mi línea de la pintura. Además hemos incorporado con Montse el arte a objetos como pañuelos, billeteras, ahora hemos mandado a hacer bolsos, que van a tener diseños con los estilos de cada una de nosotras. Ese es un proyecto que venía desde hace tiempo y la idea es seguir incorporando otros productos y trabajando con otras personas que nos ayudan a concretar esos proyectos y hacerlos más reales. 

Y respecto a capacitaciones, en mi caso yo pinto con acrílico y en cuarentena tomé cursos de acuarela que es una técnica que me gusta mucho, pero no la domino. 

¿Cómo es tu proceso creativo? ¿Una obra se empieza y se termina o puede quedar inconclusa y luego se retoma?

La parte más compleja y la que me lleva más tiempo es plantear la obra, no hago bocetos previos, cuando me llega la idea en mi taller siempre tengo que tener un bastidor para poder plantearlo directamente sobre el bastidor, siempre trabajo con un color de fondo porque me gusta también cómo actúa el color de fondo con los que le pongo encima. Dibujo con un lápiz pastel que es como una tiza que puedo borrar si algo no me gusta del planteo, si el dibujo no me convence no sigo con el siguiente paso que es el delineado, eso puede llevar días, porque son dibujos muy complejos, con muchos detalles, superposición de personajes, de formas, luego del delineado empiezo con el color.

Me pasa que a veces voy pintando dos cuadros a la vez, porque a veces te cansa una paleta de colores y tenés la necesidad de cambiar y voy con el otro, porque la parte más difícil que es el diseño ya lo tengo resuelto.  

Yo a diferencia de otros artistas no puedo taparlo y volver a empezar, porque se nota mucho el diseño que está abajo por la cantidad de capas que le voy dando, el relieve que tiene es diferente al relieve del delineado, entonces si me equivoco, si no me gusta o quiero taparlo, estoy complicada. Una vez me pasó que algo no me gustó, quise taparlo y no quedó bien asique tuve que volver a repetir el delineado y dejarlo como estaba.

Por mi estilo de pintura, tengo que ser muy cuidadosa y no puedo permitirme equivocarme.

¿Cuál es la sensación cuando terminas una obra?

Cuando termino una obra de arte, donde termino de pintar todos los pedacitos, controlo si da esa sensación que yo quiero lograr en el espectador, eso de retenerlo un momento delante de la obra, ver que los inspira y que genera. Ahí está la obra terminada con la devolución del espectador.

¿Cuesta desprenderse de ellas?

Al principio si me costaba desprenderme, pero después uno aprende que la obra fue creada para una persona en especial y que espera a esa persona para que se la lleve y esté en un hogar, en una habitación en un living y complete esa casa, que le dé más calidez. Una obra elije a la persona para que la disfrute y la vea colgada.

Pero también tengo obras que son parte de procesos internos y esas obras pasan a ser de mi colección privada de mis propias obras, tengo un par de ellas que siento que me eligieron a mí, porque me pasa con algunas de las obras que me encantan demasiado y decido que se queden conmigo porque marcan un cambio en mi tipo de pintura o por ahí porque han representado algo muy íntimo mío, entonces esas se quedan conmigo para acompañarme.

¿Proyectos post pandemia?

Como proyecto la feria de artistas del año que viene, que es exclusivamente de artistas, no como la de otros años que participamos como espacio de arte. En este caso vamos a participar como artistas plásticas, estamos muy emocionadas, muy contentas, produciendo para que la gente tenga la oportunidad de ver nuestro arte y quede encantada. Vamos a llevar distintas alternativas y tamaños para que la gente tenga varias opciones para poder llevarse.

Y llevaremos los objetos de diseño que estamos realizando como un arte aplicado a objetos funcionales, que eso nos gusta mucho y es algo que surgió en esta pandemia. El dar una alternativa para que esas personas que por ahí ven muy caro una obra de arte, pueda llevarse algo para que lo puedan disfrutar.

También tenemos proyectadas muestras de un artista de Buenos Aires en nuestro espacio y nuestra muestra que ojalá se pueda concretar el año que viene o el próximo.

¿En qué crees que nos va a transformar esta pandemia?

Yo creo que esta pandemia ha hecho que muchas personas se replanteen su forma de vivir, priorizar cosas que por ahí las pasábamos por alto, escucharnos un poco más. Creo que en eso ha sido favorable, al menos adentro mío ha logrado que buscara cosas que realmente me gusten y alternativas para realizarlas.

Amo el arte, vivo del arte y he logrado abrir otras posibilidades para que todos puedan disfrutar de tener un objeto lindo y para mí que una persona use algo que tenga mi nombre, eso me enorgullece. Yo estoy siempre agradecida a esas personas que estuvieron en parte de mi formación que me incentivaron a que no fuera solo profesora, porque los límites se los pone uno mismo, no hay límites.