Julieta Silva, conocida por su condena en 2018 por la muerte de Genaro Fortunato, fue nuevamente detenida este jueves 24 de julio en San Rafael. La mujer fue imputada por el delito de lesiones leves agravadas por el vínculo, tras una denuncia presentada por su esposo, Lucas Giménez.
El incidente que dio origen a la causa ocurrió el pasado 12 de julio, cuando Giménez llamó al 911 desde el baño de su domicilio, solicitando auxilio por una situación de violencia doméstica. Al llegar al lugar, el personal policial constató que el hombre presentaba una escoriación y una tumefacción en el rostro.
Tras la denuncia, la Fiscalía de Instrucción N°2 de San Rafael inició una investigación que incluyó peritajes médicos y declaraciones testimoniales. Con base en las pruebas recolectadas, se imputó formalmente a Silva y se ordenó su detención bajo la modalidad domiciliaria, con monitoreo mediante tobillera electrónica, considerando su rol como cuidadora principal de la hija de un año que tiene en común con Giménez.
Cabe recordar que Julieta Silva fue condenada en 2018 a tres años y nueve meses de prisión por homicidio culposo agravado, tras atropellar y matar a su entonces pareja, el rugbier Genaro Fortunato, en septiembre de 2017. Cumplió parte de su condena bajo arresto domiciliario y recuperó la libertad en marzo de 2020. En diciembre de 2022, contrajo matrimonio con Lucas Giménez.
Este nuevo episodio judicial reaviva la atención pública sobre Silva, quien nuevamente enfrenta cargos relacionados con hechos de violencia.