de

San Rafael

La discusión del cambio del huso horario: un debate que vuelve

Martes, 2 de Setiembre de 2025

Hace unos días, la Cámara de Diputados de la Nación dio media sanción a un proyecto de ley presentado por el ex vicepresidente Julio Cobos, que propone modificar el huso horario en Argentina. La iniciativa busca retrasar una hora los relojes de todo el país, adecuando la hora oficial a la luz solar y reduciendo así el consumo de energía eléctrica.

Actualmente, Argentina se rige por el huso horario -3 GMT, aunque la mayor parte del territorio debería estar en el -4 GMT, y gran parte de la zona cordillerana -incluida Mendoza- en el -5 GMT. Este desfasaje genera consecuencias que van más allá de lo técnico. Como ejemplificó Cobos: "Un chico que se levanta a las 7 de la mañana para ir a la escuela, en Mendoza se está levantando a las 5:30". De allí la importancia de ajustar el horario a la realidad geográfica, mejorando el descanso y el rendimiento de miles de alumnos.

Argentina ya alternaba entre husos horarios en el pasado, especialistas sostienen que habernos quedado en -3 en lugar de -4 es un equívoco, ya que ese horario no se corresponde con su ubicación natural.

Para entender la relevancia geográfica de la medida consultamos al respecto al licenciado en Geografía y docente del IES del Atuel, Santiago Mondeja quien explicó cómo se organizaba el tiempo antes de los husos horarios oficiales: "Hasta mediados del siglo XIX, los seres humanos se manejaban con la famosa 'hora local', relacionada directamente con el horario solar. Cada comunidad tomaba un meridiano de referencia y ajustaba sus relojes cuando el sol estaba en su punto máximo. Toda la vida social, productiva y de consumo se organizaba según ese ritmo solar".

Y agregó que la necesidad de un horario oficial surgió con la llegada de nuevas tecnologías: "El problema empieza cuando aparecen nuevas tecnologías como el telégrafo y el ferrocarril, que requieren sincronización horaria. Ahí es cuando surge la necesidad de un horario oficial en Argentina".

"En el siglo XX nos adherimos a la hora oficial mundial, la Hora Universal Coordinada: comenzamos con -4. A mediados del siglo XX pasamos a -3 y hemos tenido etapas de -2, y cambios de horario de verano, hasta que en 1969 se adoptó definitivamente -3."

Y continuó diciendo "entre 2007 y 2009 se hizo horario de verano, y en 1929 se intentó volver a -4, pero no prosperó. Una larga historia de búsqueda de equilibrio en los usos horarios del país."

En cuanto a la propuesta actual, el especialista indicó que "nos correspondería -4, que sería el adecuado para nuestra región, Mendoza y Cuyo. El proyecto propone que en verano se adopte -4 y en invierno se vuelva a -3, planteando dos grandes etapas". Y explicó la situación particular de San Rafael: "Si se dividiera Argentina por zona horaria, quedaría -4 para Buenos Aires y -5 para provincias del Oeste como Mendoza. Nosotros podemos manejarnos con -4, que sería lo más adecuado".

No obstante destacó que San Rafael, junto a la Ciudad de Mendoza y San Juan, forma parte de las principales localidades del país ubicadas geográficamente en el huso -5 GMT. También pertenecen a este huso zonas de Catamarca, La Rioja, parte de la cordillera salteña y varias localidades de la Patagonia, como Neuquén, San Martín de los Andes, Bariloche, El Bolsón y Río Grande.

El último cambio de huso horario en Argentina ocurrió entre octubre de 2008 y marzo de 2009, cuando el país adoptó el -2 GMT, excepto 13 provincias -entre ellas Mendoza- que permanecieron en el -3.

Hoy, con la media sanción de la Cámara de Diputados, el debate vuelve a estar sobre la mesa, mezclando geografía, ciencia, vida cotidiana y política energética.