Mientras cumple su condena por liderar una intentona golpista contra el gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva, Jair Bolsonaro fue operado. Desde que fu apuñalado durante la campaña electoral que lo llevó a la presidencia de Brasil, Bolsonaro padece recurrentes problemas de salud.
El convicto ex presidente de Brasil Jair Bolsonaro, de 70 años, permanece internado en un hospital de Brasilia luego de someterse a un nuevo procedimiento médico para tratar sus crisis de hipo. Según el equipo que lo asiste, su cuadro es estable y, si no surgen complicaciones, regresará a la cárcel el 1° de enero.
Bolsonaro fue sometido este lunes a un bloqueo anestésico de un nervio que controla el diafragma, en este caso del lado izquierdo, intervención que se extendió durante cerca de una hora. El sábado ya se le había realizado el mismo procedimiento del lado derecho, como parte del tratamiento para un cuadro que arrastra desde hace meses.
El cirujano Claudio Birolini explicó que "se necesitan al menos 48 horas para evaluar los resultados" y precisó que, de no registrarse nuevas complicaciones, el exmandatario permanecerá internado hasta el 1° de enero. Además, indicó que Bolsonaro deberá someterse a una endoscopia entre martes y miércoles como parte del seguimiento clínico.
Tras esa intervención, los médicos ya habían advertido que podría requerirse un procedimiento adicional de menor complejidad para abordar el hipo persistente. El ex presidente convive desde hace años con secuelas abdominales derivadas de la puñalada que sufrió durante un acto de campaña en 2018, episodio que motivó múltiples cirugías mayores.
"Ha pasado ya nueve meses de lucha y angustia con hipo a diario", expresó el sábado su esposa, Michelle Bolsonaro. Una vez que reciba el alta, el exmandatario deberá regresar a la pequeña habitación donde cumple su condena, en una sede de la Policía Federal en Brasilia.
La Corte Suprema lo condenó a 27 años de prisión por haber intentado aferrarse al poder tras perder las elecciones de 2022 frente a Luiz Inácio Lula da Silva. La Justicia ya rechazó el pedido de su defensa para que cumpla la pena bajo arresto domiciliario, pese a los argumentos vinculados a su estado de salud.