El presidente decidió viajar este miércoles sin anuncio previo a Bahía Blanca para monitorear personalmente desde el lugar la asistencia a los afectados por la trágica inundación.
El presidente Javier Milei llegó este miércoles a Bahía Blanca para monitorear desde el lugar la asistencia del Gobierno a las víctimas afectadas por la trágica inundación que azotó a la ciudad bonaerense, dejando un saldo de 16 muertos, 94 desaparecidos e incontables daños materiales.
Acompañaron al mandatario en su viaje oficial la secretaria General de la Presidencia, Karina Milei, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich -que ya había visitado la localidad tras el desastre- y el jefe de Gabinete, Guillermo Francos. Allí se encontraron con el titular de la cartera de Defensa, Luis Petri, que ya estaba coordinando las tareas de las fuerzas armadas en la zona.
Fuentes oficiales explicaron a MDZ que el traslado del presidente -llegó a Bahía Blanca pasadas las 8- se mantuvo en hermetismo "para que nadie diga que es un viaje político o para la foto". "Milei ya hablaba con el intendente todos los días y se hizo así, incluso sin avisarle", agregaron. Por ese motivo, la comitiva no viajó acompañada de un fotógrafo como suele ocurrir en las actividades normales del jefe de Estado.
El objetivo del viaje del mandatario es poder seguir de cerca el despliegue del operativo del Gobierno en la zona dedicado a asistir a las víctimas y damnificados del feroz temporal que provocó que el municipio quedara bajo el agua. En ese marco es que Milei se reunirá con el intendente de Bahía Blanca, Federico Susbielles, para interiorizarse sobre las necesidades de la localidad, según pudo confirmar este medio.
El desembarco del presidente coincidió con la llegada del Tren Solidario, el cual partió el lunes por la noche desde la localidad porteña de Constitución tras juntar donaciones durante tres días para brindar ayuda y llevar un poco de alivio a las familias de Bahía Blanca que lo perdieron todo en las inundaciones.