El fiscal Javier Giaroli imputó ayer al abogado Andrés Mariani en una causa que expone prácticas que, de confirmarse, rozan lo escandaloso y golpean de lleno la credibilidad del fuero laboral.

Mariani, conocido por su alto volumen de expedientes, es investigado por presuntamente haber montado un "staff fijo" de testigos, integrado por al menos doce personas, que aparecían de forma reiterada en gran parte de sus juicios. La maniobra, según la hipótesis fiscal, no se limitaba a una simple repetición de nombres: los testigos adoptaban distintos roles según el expediente, pasando de ser choferes a puesteros, compañeros de trabajo, testigos ocasionales, e incluso -en ciertos casos- parejas sentimentales de las presuntas víctimas.

Una especie de casting judicial meticulosamente armado para sostener relatos a medida y obtener fallos favorables.

La investigación de estas irregularidades inicia por parte del estudio de los doctores Luis Francisco Castilla y Valeria Vizcaya, quienes  tomaron participación en este caso a raíz de una denuncia realizada por un damnificado por un delito de estafa, quien denunció que no pudo ser continuada por la abogada que la inició, que en ese entonces era la doctora Mariela Sosa, quien tuvo que dejar la causa a raíz de una serie de hechos que podrían interpretarse a las claras como una intimidación, hostigamiento y amenazas que es lo que trascendió en algunos medios.

Al respecto Castilla detalló, "la doctora renuncio y es allí donde el damnificado acude a nosotros y nos traslada sus inquietudes, nos comunica que habrían algunos nombres en algunas causas que se repiten. Por esa razón con la doctora Vizcaya empezamos a realizar una investigación exhaustiva de los expedientes en el que él y otros colegas intervenían y nos empezamos a dar cuenta que en los juicios tanto ejecutivos como laborales y civiles veíamos ciertas similitudes del abogado al iniciar dichos procesos. Era siempre el mismo, se repetían los testigos en todas las demandas y en los procesos dichos testigos declaraban favoreciendo a la parte representada por el abogado Mariani Andrés. Llamativamente con estos testigos lograba sentencias exitosas".

Y continuó diciendo "las demandas y estos testigos, que son como 15, nos fueron llevando a otras causas, por las cuales también se han realizado denuncias y en otra jurisdicciones en las cuales soy abogado y represento a la parte querellante. Dónde también está involucrado uno de los testigos que más suena en todas las causas que es el señor Carloni, quien a raíz de investigaciones que hemos realizado en el estudio, tanto con mis socios como con la doctora Vizcaya, pudimos probar que es tío materno de Andrés. A pesar de que en sus declaraciones manifestara no tener ningún interés en el resultado del pleito. Las mismas audiencias constan en soporte fílmico y han sido ofrecidas como prueba. Ni Mariani, ni Carloni jamás advirtieron a los juzgados sobre su relación, esto claramente es una estafa procesal".

Sobre su representado agregó que "inicialmente estaba totalmente desamparado, desoído por los tribunales, totalmente afectado con varias denuncias que había acompañado con pruebas y en todas habían sido demoradas o archivadas".

"Cuando ingresamos a trabajar con la doctora Vizcaya sorpresivamente fue archivada sin producirse un medio de prueba. Esto fue una decisión de la fiscalía a cargo de la Dra Andrea Rossi, quien al dictaminar llamativamente el archivo, hizo que este equipo legal se opusiera al archivo oportunamente y acudir ante el juez de garantías penal, quien con muy buen tino, el doctor Claudio Gil resolvió a favor de lo que nosotros pedíamos que era que esta causa continúe así como la investigación, ante la gran cantidad de prueba aportada oportunamente en la denuncia".

Respecto a la fiscal Andrea Rossi, el letrado destacó que "quedo apartada de dicha causa y tomo intervención el doctor Giaroli, quien en forma inmediata y sin tapujos se avocó la causa y a producir los medios de prueba que nosotros habíamos requerido con más otros que la fiscalía solicito. Entendíamos que no iba a ser una causa simple entendemos que no lo es, existe un montón de gente damnificada a la espera de justicia que debió callarse, porque bueno en la forma de modus operandi de este clan que es asfixiante".

Y finalizó diciendo "nuestro rol como representantes de querellantes es acompañar a la fiscalía en todo este procedimiento y en la obtención de nuevos medios de prueba. Quiero invitar a aquellas personas que hayan sido damnificadas o que hayan perdido un juicio de forma increíble o donde se les estén reclamando sumas de dinero por este estudio, que se acerquen a nosotros o a la fiscalía y hagan sus denuncias y acompañen su documentación, porque encontrarán ahí en la en la fiscalía del doctor Giaroli el amparo judicial que las víctimas necesitan".

"El proceso nos ha llevado varios meses cerca o más de un año hemos encontrado varios obstáculos pero lo hemos podido ir sorteando en honor a la verdad a la búsqueda incansable de justicia, también lo hacemos en parte porque bueno la profesión está muy denostada hay colegas que se dedican a ensuciar la profesión y es nuestra tarea reivindicar la tarea del abogado noble y ético".