La periodista fue consultada a través de un Instagram Live que hizo Laura Ubfal. Qué contó Marina.
Las turbulencias en la relación entre Marina Calabró y el periodista especializado en crimen Rolando Barbano quedaron atrás y con el paso de los días el amor florece y reconforta la relación que confirmaron en marzo del año pasado. Después de la crisis, ahora se vendría el casamiento.
Luego de su debut en la señal de A24, Calabró participó en el debate del reality Gran Hermano y dio señales de una posible ceremonia para que el amor quede grabado en el anillo que los una. Fue en un vivo de Instagram de Laura Ubfal donde se generó la posibilidad: "Si, si, sí. Acá está Marina Calabró. ¿Y de qué puede estar hablando sino de Rolando Barbano?", esbozó la periodista de espectáculos.
"¡Que enamorada que estás! ¿Cuándo te casás?", le preguntaron a la conductora televisiva que acompañado de un simple gesto dijo: "No hay que descartar nada". Lo cierto es que no se dieron precisiones de cuándo sería la ceremonia ni el lugar donde se haría.
Marina Calabró debutó esta semana como conductora en la señal de A24 y ya tuvo su primer momento de tensión. Junto a Facundo Pastor ascendió a la conducción de Arranca la Tarde, a las 13, mientras que su pareja, Rolando Barbano, estrenó Código de Noticias junto a Soledad Larghi a las 14:30.
Justamente en su estreno, la comunicadora protagonizó un momento que rozó lo bizarro cuando a la hora de realizar el pase con sus colegas del siguiente programa, corrió a los brazos de su novio, lo abrazó y le dio un beso: "No dormimos juntos anoche, hubo una veda para que hoy haya energía", expresó él. Esta dinámica no fue así en los días consecutivos.
Si bien en el vivo se mostró como pez en el agua, no fue hasta terminado el último programa que trascendió su malestar por un incómodo momento que vivió en el pase: "El tema es así... me dicen que llorando en el piso no la vieron pero que si, el pase le cayo como el orto por que se pusieron a hablar del día que Marina ganó el Martín Fierro y se lo dedico a Rolando, y el tipo le cortó el rostro", comienza el mensaje que recibió Pepe Ochoa, el community manager de LAM, que rápidamente lo compartió en las redes sociales del programa que conduce Ángel de Brito por América TV, pero que luego se arrepintió y borró.
"Marina Calabró se fue llorando del pase en A24", agregó Ochoa a la captura de una conversación de WhatsApp donde se detalló el momento de furia de la conductora: "Eran Rolando, Facundo Pastor, Soledad Larghi y Marina hablando de eso. Y que se le notaba a la mina la incomodidad".
Cabe recordar que en los Martin Fierro, Marina Calabró fue premiada a mejor Columnista de Espectáculos y a la hora de recibir el premio agradeció a sus colegas y a su pareja, Rolando Barbano. Sin embargo, su dedicatoria de amor no fue correspondida. Cabe recordar que por aquellos días había una especie de "crisis" en la pareja de periodistas.
"Se lo quiero dedicar a Jorge Lanata, que se está reponiendo, que me permite trabajar con libertad hace nueve temporadas. A todos mis compañeros, a esa mesa hermosa, Negrita Verón, Andrea Rodríguez... a Rolando" y para cerrar su paso del escenario agregó: "Gracias APTRA. Y lo quiero compartir y dedicárselo con mi amor...sí, a vos, Rolando". Las cámaras, rápidamente, se posaron en el periodista, quien mostró señas de incomodidad en sus expresiones. Más adelante en la ceremonia, Rolando fue coronado con el premio a Columnista Policial y no tuvo el mismo gesto.
En entrevistas sucesivas al evento, ambos protagonistas confesaron que fue un "momento traumático", aunque lograron superarlo. Es a tal punto que el mismo día que debuto en la conducción, también se presentó al debate de Gran Hermano, donde ocupa el lugar de panelista rotativa.
Laura Ubfal aprovechó que Marina se sentó a su lado en el panel para grabar una historia de Instagram: "Si, si, sí. Acá está Marina Calabró. ¿Y de qué puede estar hablando sino de Rolando Barbano?", suelta irónica la periodista. "¡Que enamorada que estás! ¿Cuándo te casás?", intervino Pilar Smith desde el otro lado de la mesa. Marina hizo un gesto de pensativa, y luego abrió la puerta de la especulación: "No hay que descartar nada", dando a entender que las cosas con su novio están a punto caramelo.