Carolina "Pampita" Ardohain viajó a España para participar en el desfile de Carolina Herrera como embajadora de la prestigiosa marca de perfumes. La modelo fue víctima de un hecho de inseguridad mientras se encontraba en el exterior.

Delincuentes entraron a la casa en un exclusivo barrio de Palermo tomada en la calle Juez Tedín. Los asaltantes lograron llevarse, según la primera información, dinero en efectivo de una caja fuerte y diversos objetos de valor.

Ya en Argentina, Pampita habló con la prensa y confirmó la noticia y se lamentó por lo sucedido. "Lo más importante son las fotos y videos de mi hija de un valor incalculable", dijo refiriéndose al robo de dispositivos móviles con imágenes de su Blanca, su hija fallecida en 2012.

Al mismo tiempo, reconoció que de haber estado ocupada la casa con sus hijos o la gente que trabaja con ella la situación hubiera sido "horrible". Vale aclarar que en el momento del robo no se encontraba ni la modelo, ni sus hijos y tampoco el personal que acompaña en las tareas domésticas.

"No puedo dar más datos del robo, solo decir que hay secreto de sumario, no puedo decir nada sobre el tema, solo agradecer dios y pedir por esos teléfonos porque no puedo encontrar ese material en ningún otro lado", insistió a la prensa.

En otro momento de su descargo con los medios, la modelo culpó en parte a la prensa por exponer la vivienda. "Hay que cuidar la intimidad de la vivienda", dijo un tanto molesta la conductora de El Trece.

La vivienda es la misma que compartía Pampita con su exmarido Roberto García Moritán y fue blanco de las cámaras cuando el funcionario político se retiraba de esa casa con bolsas de residuos donde llevaba su ropa.