de

País

Chubut declaró el estado de emergencia climática por fuertes vientos de al menos 140 kilómetros por hora

Se registraron destrozos en ciudades como Comodoro Rivadavia y alrededores. El Gobierno de Chubut suspendió las clases y limitó la circulación en rutas.

Martes, 18 de Noviembre de 2025
(217468)

El Gobierno de Chubut declaró este lunes el estado de emergencia climática en toda la provincia debido a los fuertes vientos que llegaron a los 140 kilómetros por hora durante la jornada. El pronóstico del tiempo proporcionado por el Servicio Meteorológico Nacional incluye ráfagas de hasta 90km/h para este martes.

El gobernador de Chubut, Ignacio Torres, compartió a través de sus redes sociales el anuncio sobre los alertas nivel rojo, naranja y amarillo emitidos por el Servicio Meteorológico Nacional para este lunes, 17 de noviembre, por fuertes vientos.

Las zonas alrededor de Puerto Madryn, Rawson y prácticamente toda la costa de Chubut quedó en alerta amarillo, mientras el sur de la provincia -hasta llegar al Atlántico, donde afectó a Comodoro Rivadavia- quedó en rojo. La porción del centro y la cordillera quedó en naranja.

El contenido al que quiere acceder es exclusivo para suscriptores.

Durante la tarde del lunes se registraron destrozos, voladura de techos y caída de árboles, postes y otros elementos de infraestructura en ciudades como Comodoro Rivadavia, lo que motivó a las autoridades a proveer al público de una línea de emergencia:

El contenido al que quiere acceder es exclusivo para suscriptores.

Defensa Civil: 297-4040117 / 297-4042152

El contenido al que quiere acceder es exclusivo para suscriptores.

Debido a las circunstancias y al pronóstico del tiempo para los primeros día de la semana las autoridades chubutenses resolvieron suspender las clases y restringir la circulación por rutas y caminos rurales, además del establecimiento de protocolos de atención en centros médicos para garantizar la atención de guardia por sobre los turnos programados.

Los fuertes vientos y la condición desastrosa de la infraestructura obligó a suspender traslados que no fuesen indispensables, y a evitar las actividades recreativas y sociales de todo tipo.